Varios carteles como este estaban pegados en las paredes de mi barrio. Tanto la fotografía como el asunto que cuenta producen una especie de grima indefinible. Se queda el problema a medio resolver, no sabemos qué ocurrió al no aparecer los mariachis, no sabemos si ella actuó finalmente sola y no explica en que bar o sala tuvo lugar. Sabemos solo que ella se sintió en algún momento blanco de acusaciones que no se merecía y, haciendo gala de una especie de “nobleza baturra”, se defiende empapelando el barrio con su insignificante problema de honor que a nadie importa. Y con esa pose de persona que no falta a su palabra. Es entrañable y gracioso y repulsivo a la vez. Picad en la imagen y leed lo que pone. Y mirad que galana, la señora Bandida.
4 comentarios:
en serio? esta mujer es real? jaja..pues no quiero ni imaginar cómo serían los mariachis desaparecidos..
Me he fijado en que sí viene una dirección. Voy a ir este fin de semana a investigar.De los mariachis dice "los chicos actuaron...".
Un nuevo e inquietante caso para el sapo tuerto, que en el país de los sapos ciegos es el rey.
No sé porque pero esa visita tuya al bar de los "mariachis" me da a mí que va a dar mucho qu hablar.
Sobre Labandida, digna de admirar, no sabía yo que ahora el honor se limpiaba colgando carteles.
Voy a ir de incógnito, haciéndome pasar por un vendedor de nuevas facturadoras de gas ciudad.
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