Tendríais que haberlo visto. Un instante glorioso. El bim-bam-bum de todos los instantes. Me explico, ¿habéis cagado en una cuña de hospital? No os lo vais a creer pero las cuñas tienen fondo, y está muy cerca del culo, de manera que la mierda enseguida embadurna las nalgas. Luego vienen unas señoras muy grandes hablando de sus cosas como si estuvieran en el lavadero mientras te limpian el culo, o a lo mejor tienes suerte y te aparecen unas señoritas más finas y te limpian el culo de manera más apresurada pero más bonita de fotografiar. De todas formas ninguna mano ajena te lo dejará tan bonito como la tuya. También está el problema de que el largo zurullo va saliendo del orificio pero falta la fuerza de gravedad necesaria para hacer esa pequeña contracción con el esfínter, que hace que el pedazo de mierda caiga por su propio peso, dejando la cagada a medias. Así, la persona encargada de limpiarte tiene que separar manualmente esa longaniza sin fin y la limpieza es más imperfecta. Pues ahora viene lo bueno...por fin me han quitado el suero que entraba mediante una bomba y me han podido sentar en la taza del váter. Mi primera comunión, en la que me regalaron el Madelman de la policía montada del Canadá con su precioso traje rojo y su husky siberiano, mi primer beso de amor, o mi sobresaliente en Matemáticas con el Aceituno no son comparables a la felicidad que me embargó al oir al zurullo chapotear bajo mi culo, en el abismo de la taza del váter. Quise alargarlo pero no pude, solo fue un cuarto de hora de felicidad que ya no volverá. Y sí, sí, sí...mereció la pena la trombosis que Dios alojó en mi cerebro por ese momento único. Y desde aquí me retracto del post anterior y le doy las gracias prometiéndole algún sacrificio que ya me pensaré cuando no me acuerde. Desde el Hospital de Cabueñes informa Javi Guerrero.
En la imagen, una historia escatológica que no viene mucho al caso pero que trata de lo mismo.
En la imagen, una historia escatológica que no viene mucho al caso pero que trata de lo mismo.
5 comentarios:
Te deseo una pronta recuperación. Saludos a tu familia. Un fuerte abrazo.
Tony Gómez.
¡Coño Javi!, ¿tu caída del caballo ha sido el puñetero trombo?; ya lo dice la Iglesia: "los caminos del Señor son inexcrutables". Me alegro de tu momento glorioso, por el avance que supone. Me ha recordado a un jefe que tuve hace muchos años, que se le fastidiaron los dos riñones por una reacción alérgica de unos tranquilizantes y tras estar tres años con diálisis recibió un riñón en un trasplante. Me comentó la felicidad que experimentó al mear con normalidad después del trasplante. Por cierto era un cabronazo, aunque muy inteligente y buén profesional. Sólamentee consideró como persona y como profesional después de "machacarlo" tres veces al ajedrez. A partir de ahí cambió su actitud y seguramente debió pensar que era un poco menos tonto de lo que pensaba.
Javi me alegra que vayas evolucionando bien, por lo deducido.
Dime en el correo o donde quieras una dirección de envío de unas óperas y "algo" de música. Un abrazo.
¿Este cómic está hecho con la mano izquierda ya? está de puta madre!
Ya mismo te veo dibujando con las dos manos a la vez y entonces en un mes tendrás echa una novela gráfica de estas modernas, jojo
Me alegro de que vayas mejorando, mucho ánimo.
Mariano, cuando quieras te reto al ajedrez!
Bueno, una novela gráfica "hecha", de hacer, no "echa" de tirar, pero vamos, que sí, que ánimo! :D
Tony, gracias, hoy estuvieron tus sobrinos por aquí.
Mariano, si fuera por mi ajedrez podría pasar por subnormal profundo.
Fernando, estoy haciendo prácticas con la izquierda pero todavía no he publicado ninguno.
Saluditos.
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